CERRANDO LA BRECHA: APOYANDO LA LACTANCIA MATERNA EN TODAS LAS SITUACIONES
Closing the gap: Supporting breastfeeding in all situations
Colmatar a lacuna: Apoiar a amamentação em todas as situações
Closing the gap: Supporting breastfeeding in all situations
Colmatar a lacuna: Apoiar a amamentação em todas as situações
Estimados lectores:
La Semana Mundial de la Lactancia Materna (SMLM) se celebra en casi todo el mundo entre el 1 y el 7 de agosto de cada año, conmemorando la Declaración de Innocenti, acuerdo internacional logrado en Italia en favor de la protección, la promoción y el apoyo a la lactancia materna.
Este año 2024, el lema propuesto por la Word Alliance for Breastfeeding Action (WABA) es ¨Cerrando la brecha: Apoyando la lactancia materna en todas las situaciones”.
Desde el punto de vista de las políticas públicas en materia de equidad, una brecha puede describirse como aquellas asimetrías o desigualdades surgidas de los procesos o situaciones que causan exclusión e inequidad, y afectan a determinados grupos sociales.
Los objetivos para esta semana son informar sobre las desigualdades existentes en el apoyo a la lactancia materna y consolidar la lactancia materna como factor igualitario para cerrar brechas en la sociedad.
El lema de este año está en estrecha relación con el segundo Objetivo del Desarrollo Sostenible 2030, ¨Hambre cero y seguridad alimentaria”.¹ Ambos sostienen la importancia de involucrar lideres y organizaciones que trabajen sobre los primeros 1000 días de vida, para influir directamente en el descenso de la desnutrición infantil y en la mortalidad en menores de 5 años. Principalmente en situaciones de emergencia como la guerra o la pobreza donde cerrar la brecha salva vidas.
La lactancia materna posee beneficios ampliamente conocidos para la madre y el recién nacido, que impactan directamente en su salud a corto, mediano y largo plazo. Pero también sabemos con exactitud los beneficios que presenta para toda la sociedad, con implicancias directas en la salud pública, la educación, la economía, el medio ambiente y hasta en el ámbito psicosocial en el que continuamente interactuamos como comunidad.
Pero hoy, a pesar de conocerlos, la población mundial continua en riesgo. El promedio mundial de lactancia exclusiva (LE) a los 6 meses es de un 48 %, siendo de un 43 % en América Latina y el Caribe.² Es decir que menos de la mitad de los recién nacidos reciben LE en sus primeros meses de vida.
Mundialmente un 65 % de los niños de 12 a 23 meses reciben lactancia materna, pero en nuestra región desciende a un 48 % las madres que logran amamantar según las recomendaciones vigentes.
En el territorio argentino, según los datos presentados por la Encuesta Nacional de Lactancia (ENaLac) en el 2022, el 44,7 % de los niños de 6 meses reciben LE, produciéndose un aumento de solo el 3 % con respecto al 2017.³ La brecha se evidencia en las tasas de lactancia de las distintas provincias, entre un 30,4 % y un 65,8 % de LE de 0 a 6 meses.³ Estos datos alarman y espero que nos hagan tomar conciencia de la necesidad de un rol activo, dirigido y perseverante en nuestros ámbitos cotidianos.
Para disminuir la brecha, la WABA menciona cuatro puntos de acción:¹
1. Necesidad de apoyo a la lactancia materna durante la primera semana crítica.
2. Pleno cumplimiento del Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna.
3. Realización de esfuerzos para garantizar la lactancia materna en los grupos más vulnerables.
4. Inversión en lactancia materna para abordar desigualdades.
Como colectivo profesional, dedicado a la perinatología y a la neonatología, tenemos un rol invaluable, directamente relacionado con al menos los tres primeros puntos mencionados.
La internación conjunta es una oportunidad única para educar en el fomento de la lactancia materna y disminuir la brecha en la primera semana critica. La capacitación prenatal de los progenitores, el parto natural, el contacto piel a piel inmediato y continuo, el inicio de la lactancia en la primera hora de vida, la internación conjunta de la diada, el seguimiento de la lactancia durante la internación y la información oportuna a cada familia son algunas de las estrategias sugeridas para favorecer la lactancia materna.
En la unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN), la lactancia materna puede verse amenazada y ser un factor para aumentar la brecha entre recién nacidos sanos y recién nacidos que requieren atención especializada. Las tasas de lactancia exclusiva al alta en las UCIN rondan a nivel mundial entre el 20 y el 68 %.4 Para mejorar las tasas es indispensable disponer de políticas y prácticas institucionales que favorezcan la lactancia, el acceso irrestricto de los padres las 24 horas del día, espacio físico para favorecer la permanencia y sistemas de apoyo emocional a la familia.
La evidencia nos ha dado a conocer acciones concretas que mejoran los resultados en esta población vulnerable como la extracción de calostro antes de las 6 horas de vida, el contacto piel con piel temprano y continuo, la succión no nutritiva durante la alimentación por sonda gástrica, la estimulación sensorio-motora oral, limitar el uso de chupete o pezoneras a los momentos precisos con reevaluación periódica, el cuidado oral con leche materna hasta la alimentación oral y la transición de la sonda al pecho guiada por el lactante.4,5
Dentro de la educación a las madres que tienen a sus hijos en la UCIN, se encuentran la sugerencia de 8 extracciones al día, al menos una nocturna, el uso de sacaleches, preferencialmente eléctricos después del tercer día de vida y estimular la extracción doble después de los 7 días de vida. Continuar con contacto piel con piel la mayor parte del tiempo posible y en lo posible lograr la obtención de 500 ml/diarios de leche materna a los 14 días de internación.4,5
Todas estas intervenciones dentro de la UCIN como aquellas de seguimiento y sostén de la lactancia una vez dada el alta son cruciales para mejorar las tasas de LE de esta población que presenta numerosos desafíos para alcanzar la alimentación adecuada.
Que esta SMLM 2024 nos convoque a reflexionar qué intervenciones reforzar, incorporar o quizás también, cuáles debemos desterrar para que nuestro accionar sea concordante a la evidencia científica actual y a los objetivos planteados.
Como miembros inmersos en una comunidad, los invito a que demos a conocer a través de los diferentes medios de comunicación la necesidad de acortar la brecha. Si trabajamos cada uno en favor de la lactancia materna, habrá una mejora en la salud materno infantil y el futuro de la población mundial.
Un saludo afectuoso,
Referencias
1. Word Alliance for Breastfeeding Action [Internet]. Workd Breastfeeding Week 2024. Closing the Gap Breastfeeding Support for All. WABA, 2024. [Consulta: 28 de junio de 2024]. Disponible en: https://worldbreastfeedingweek.org/
2. Unicef. Sólo 4 de cada 10 bebés menores de 6 meses son exclusivamente amamantados en América Latina y el Caribe Agosto. [Internet] Unicef, 2023. [Consulta: 28 junio de 2024]. Disponible en: https://www.unicef.org/lac/comunicados-prensa/solo-4-cada-10-bebes-menores-6-meses-exclusivamente-amamantados-america-latina-caribe-semana-lactancia-materna
3. Ministerio de Salud de la Nación. Dirección de Salud Perinatal y Niñez. Situación de la Lactancia en Argentina. Encuesta Nacional de Lactancia, (ENaLac) 2022. Argentina, 2023.
4. Organización Panamericana de la Salud (OPS). Protección, promoción y apoyo de la lactancia natural. Iniciativa Hospital Amigo del Niño para recién nacidos pequeños, enfermos y prematuros. Washington, DC. [Internet] OPS; 2023. [Consulta: 29 de junio de 2024]. Disponible en: https://doi.org/10.37774/9789275327050.
5. Mekonnen AG, Yehualashet S, Bayleyegn AD. The effects of kangaroo mother care on the time to breastfeeding initiation among preterm and LBW infants: a meta-analysis of published studies. Int Breastfeed J. 2019;14:12.
6. Tomlinson C, Haiek LN. Breastfeeding and human milk in the NICU: From birth to discharge. Paediatr Child Health. 2023;28(8):510-526.